¡Y como lo prometí en campaña: 2 reseñas por mes tendría Ud. estimado lector este año o me dejaría de llamar Eufrosina del Sagrado Corazón de Jesús!
Gracias a este libro descubrí que no tenía depresión lectora como me había autodiagnosticado, sino que las historias que había leído en los meses pasados nomás no me enganchaban y eso hacía que me tardara mucho en terminar los libros. Pero este... ¡uff!
Era un 3 de Enero de 1985 en una granja en el estado de Kansas. Patty Day y sus hijas Michelle y Debby son asesinadas brutalmente en su casa aparentemente por el hijo mayor Ben. De esta masacre sólo se salva la pequeña Libby de 7 años.
25 años han pasado de esa masacre y Libby no sabe todavía qué hacer de su vida. Después de aquella terrible noche donde pudo sobrevivir gracias a que escapó de su casa y se mantuvo a la intemperie por algunas horas (lo cual trajo como consecuencia la pérdida de varios dedos), ha sobrevivido gracias a un fondo que se abrió a su nombre donde la gente donaba recursos para la pobre huérfana... Así que nunca ha trabajado, ni sabe cómo hacerlo, ni tiene la mínima intención de empezar.
Un día, recibe una invitación para acudir a un club de gente interesada en su caso. A cambio de su presencia, recibiría un pago, lo cual hizo que se decidiera a asistir al darse cuenta que sus recursos se estaban agotando.
Este club estaba lleno de gente ociosa, que se reunía a analizar casos de asesinatos y trataban de descifrar si realmente los culpables estaban en la cárcel, seguían libres o seguía siendo un misterio su identidad.
Al ser la única sobreviviente de esa masacre, los ahí reunidos comenzaron a atacarla con preguntas y con sus teorías sobre lo que había sucedido esa noche. La mayoría estaba de acuerdo en que no se tenían las pruebas suficientes para culpar a su hermano mayor Ben, ya que ella con tan sólo 7 años, pudo haber sido manipulada al testificar en su contra. Muchos culpaban a Runner, el papá alcohólico y desobligado de Libby, el cual se había divorciado de su mamá hace algunos años después de dejarlos en la quiebra con sus malas decisiones "empresariales". Libby se abrumó con tantas teorías y con las supuestas pruebas que esos extraños habían reunido y decidió marcharse.
Lo que la acongojaba era que realmente a ella no le constaba que Ben hubiera matado a su mamá y a sus hermanas. Creyó escuchar su voz la noche de los asesinatos pero realmente no vio a su hermano cometer el asesinato. Lo que sí le queda claro es que el terapeuta que la atendió, le hizo "coco wash" para que ella testificara en contra de su hermano, y como por aquellos tiempos no había tantas pruebas criminalistas como en la actualidad (ADN, análisis de distintos materiales, etc.), se asumió que Ben era culpable.
Y como dicen por ahí que cada crisis representa una oportunidad, Libby pensó que además de tratar de averiguar un poco más sobre su caso, podía sacar provecho de los "weirdos" del club, al cobrarles una tarifa por emprender dichas tareas. Para ello, se comunicó con Lyle quien fue quien la contactó para invitarla al club y le comunicó su propuesta. Él aceptó y ella se alistó para su primera actividad: visitar a su hermano Ben en prisión.
Aunado a la historia actual de Libby, se cuenta en el libro los días previos a los terribles asesinatos: la situación precaria en la que vivía la familia Day; la relación tóxica que mantenía Ben con una chica bastante loca, mimada y drogadicta; los rumores sobre la pertenencia de Ben a una secta satánica, y por último, la declaración de una menor de 11 años sobre un supuesto abuso por parte de Ben...
¡Uff y recontra uff! Es una historia un tanto fuerte y cruda porque narra por ejemplo a detalle la forma en la que fueron asesinadas Patty y sus hijas (nada agradable), las cosas raras que hacían los "amigos" de Ben, entre otros sucesos; pero a su vez, te mantiene al borde del asiento de la silla, sillón, cama o donde sea que lo estés leyendo, y sacas tus conclusiones gracias a los conocimientos de criminalista que adquiriste al ver todos los episodios de CSI Las Vegas, NY, o Miami.
¡Me gustó mucho el libro! Le doy 4 estrellas y media y como siempre lo digo, quien quiera leerlo, se lo puedo PRESTAR.
Saludos
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