A estas alturas de la vida, todos ya sabemos (y si no, ¿en qué mundo vive?), que Robert Galbraith es el pseudónimo que utiliza JK Rowling para escribir esta serie de novelas detectivescas cuyo protagonista es el muy voluble ex militar Cormoran Strike.
Si recuerda en el libro anterior “Career of Evil”, Cormoran había despedido a su asistente Robin debido a lo peligroso que representaba contar con alguien, que aunque fuera brillante, no contaba con la experiencia para enfrentarse a los malosos, lo cual había puesto en varias ocasiones en peligro su vida.
La historia de este libro comienza con la boda de Robin y su novio de toda la vida Matthew. El invitado incómodo es Cormoran debido a que había despedido a la novia jejeje, sin embargo, su presencia por otra parte le dio esperanzas a Robin de que le pidiera que regresara a trabajar con él.
La agencia de Cormoran tenía mucho trabajo debido a que su último caso había sido todo un éxito mediático, por tal razón, solicitó a Robin que volviera a ella, SIEMPRE y cuando prometiera ser más cuidadosa y atendiera sus sugerencias sobre cómo actuar cuando las situaciones eran potencialmente peligrosas.
El Ministro de Cultura del Reino Unido, Jasper Chiswell, se puso en contacto con la agencia ya que estaba siendo sobornado y necesitaba que averiguaran quién lo estaba haciendo. La cuestión es que el tema por el que estaba recibiendo esos sobornos no quería comentarlo (lo cual hacía un tanto complicado encontrar a los culpables), ya que actualmente era ilegal, aunque hacía unos años cuando los acontecimientos sucedieron, los permitía la ley (vaya a Usted a saber de qué se trataba).
Cormoran aceptó el caso y el ministro le comentó algunos posibles sospechosos de los sobornos, entre ellos el esposo de la Ministra de Deportes, Geraint, quien era un bueno para nada, y además tenía una mala relación con Jasper ya que se rumoraba trataba de quitarlo de su cargo.
Robin se infiltró en el Parlamento para tratar de averiguar más sobre qué traía entre manos Geraint, cuando el caso dio un giro inesperado, ya que Jasper fue encontrado muerto en su casa, y aunque aparentemente se trataba de un suicidio, la familia del Ministro no estaba de acuerdo, por lo que la hija de Jasper, Izzy, le pidió a Cormoran que investigara ahora el presunto asesinato de su papá. Los sospechosos ahora se ampliaban, desde aquellos que presuntamente los sobornaban, hasta un hijo descarriado y su esposa abusiva e interesada…
El meollo que le veo a este libro, es que tiene 647 páginas, y a mi parecer, creo que con la mitad de ellas, si se le quita toda la paja, la historia se entendería perfecto sin tanto rollo y enredo. La media estrella extra de mi calificación, sólo se la agrego porque se trata de mi sensei JK Rowling, de lo contrario se hubiera quedado en 3…
Mi calificación subjetiva:
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