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martes, 31 de diciembre de 2019

“Prométeme que serás libre” por Jorge Molist



Este libro se me hizo eteeeeeeeeernooooo, y bueno, es verdad que tiene 752 páginas pero he leído libros similares en tamaño y los pude terminar en menos tiempo, además la historia se me hizo muy similar a “La catedral del mar”, por lo que ya estaba esperando la siguiente tragedia digna de “La Rosa de Guadalupe”.

Joan Serra era un niño de 12 años que vivía en Llafranc, España. Su papá, Ramón, así como la mayoría de los habitantes de la zona eran pescadores. Un día, él y su papá vieron acercase por el mar una galera, aparentemente se trataba de sarracenos que tenían como objetivo el robo y el saqueo de la aldea. Joan trata de refugiarse con su familia, pero su mamá y sus 2 hermanas son capturadas, mientras que su papá muere tratando de defenderlos.

Joan y su hermano menor Gabriel quedan de esta forma huérfanos, por lo que se hace cargo de ellos Tomás, un amigo de su papá. Peeeero, como recuerde que esto es un drama con tintes fatalistas, resulta que Tomás se siente muy solo ya que también perdió a su familia y decide suicidarse.

Ahora sí quedan desamparados los hermanos Serra, por lo que el regidor de la zona decide que los trasladarían a Barcelona, en concreto al convento de Santa Ana esperando que ahí pudieran cuidarlos mejor y también de esta forma quitarse esa responsabilidad de encima. Bartomeu Sastre, era un comerciante a quien el regidor le había encomendado la misión de llevar sanos y salvos a los hermanos hasta el convento. Durante el trayecto, los niños quedan apantallados con el porte, el trato y los conocimientos de Bartomeu, por lo que se encariñan con él.

Finalmente cuando llegan los hermanos al convento, se topan con la desagradable sorpresa que no son bien recibidos, ya que el suprior alega que no cuentan con los recursos para su manutención. Por tal razón, Bartomeu le consigue un trabajo a Joan con Ramón Corró quien es un famoso librero. La única condición para otorgarle ese trabajo es que NO APRENDA A LEER. Empezaría como aprendiz del taller prácticamente haciendo de todo un poco. Es en esta etapa de su vida donde conoce a Felip, el clásico bulleador que lo atormentará por mucho tiempo. También conoce a Anna, quien es hija de un joyero y de la que se enamora perdidamente aunque sus encuentros sean muy breves.

A partir de este momento, comienza una serie de eventos la mayoría desafortunados, que hacen que Joan deje de ser aprendiz  para convertirse en artillero, galeote, soldado y finalmente librero, teniendo como escenario no sólo Barcelona, sino diversas ciudades de Italia,  pero siempre teniendo un objetivo en la mira: encontrar a su mamá y a sus hermanas.

Como comentaba, el libro no me atrapó, me tardé mucho en leerlo y pues… ya.

Mi calificación subjetiva:



lunes, 23 de diciembre de 2019

“Children of blood and bone” by Tami Adeyemi



La historia de este libro se lleva a cabo en una tierra denominada Orïsha. Hace muchos muchos muchos años, existían 10 clanes y cada uno de ellos contaba con un tipo diferente de magia y eran conocidos como “majis”. Con el paso del tiempo y como sucede en todas las sociedades, las personas en el poder abusaron del mismo y esto creó enojo entre los demás habitantes, hasta que llegó a gobernar un rey cuya principal misión fue la de eliminar la magia mediante la persecución y asesinato de todos los “majis”. Cabe señalar que antes de que cumplan los 13 años de edad,  los majis son conocidos como “adivinos” ya que sus poderes todavía no se manifiestan, por tal razón, muchos adivinos sobrevivieron a esa fatal persecución…

Zélie era hija de una “maji”, la cual fue asesinada hace 11 años con la llegada del nuevo rey. Actualmente vivía con su hermano Tzain y su papá en una villa de pescadores. Ella asistía con Mama Agba para “tomar clases” de costura, sin embargo realmente lo que aprendía junto con otras chicas era defensa personal.

La familia de los “majis” tenían que pagar un impuesto nomás porque así lo ordenaba el rey. Este impuesto era discrecional por lo que podía variar en monto o frecuencia. En una ocasión, los soldados llegaron a cobrarle al papá de Zélie, lo cual hizo que se pusiera muy nervioso y que casi se ahogara porque tenía la urgencia de ir a pescar para conseguir el dinero que le requerían. Zélie y Tzain decidieron ir a vender el poco producto de la pesca que tenían a la ciudad de Lagos, en la cual se encontraba el palacio real.

Amari era hija del rey, o sea, una princesa. La vida de la nobleza se le hacía aburrida y superflua. El tiempo que pasaba con sus pseudo amigas que también pertenecían a la nobleza se le hacía interminable. Por el contrario, su mejor amiga era Binta, una chica que pertenecía a la servidumbre y que era “adivina”. Un día, el rey solicita que Binta se presente ante él. Amari muy preocupada, trata de averiguar cuál es la razón por la que su papá quiere ver a su mejor amiga, por lo que se esconde para presenciar la escena. Junto con el rey, se encuentran soldados y personas de alto rango del ejército. Ellos le informan que han encontrado un pergamino, que en teoría es uno de los vestigios del pueblo mágico y que junto con una piedra solar, podrían lograr que la magia regresara. Sabiendo que Binta es una adivina, hacen que toque el pergamino para checar si éste tiene un efecto en ella. Binta al momento de tocarlo, emite una luz por sus manos… por lo que es cierto, existe todavía una posibilidad que la magia reviva, y bueno, como Binta es desechable y no puede difundir lo que acaba de presenciar, la matan. Amari toda triste, enojada, y demás al ver esta escena, decide robar el pergamino y huir de Lagos.

Durante su huida, Amari se topa con Zélie y le pide ayuda para escapar. Zélie por alguna extraña razón, decide auxiliarla y logra sacarla de Lagos. Ya lejos de la ciudad Amari les explica a los hermanos lo que sucedió y gracias al consejo de Mamá Agba, deciden partir los 3 a buscar la piedra solar para lograr que la magia regrese a Orïsha.

El libro está interesante, es el primero de una serie de no sé cuántos, pero realmente no me provocó otra cosa más que entretenimiento.

Mi calificación subjetiva:



jueves, 19 de diciembre de 2019

“El plan infinito” por Isabel Allende

 


Si recuerda usted mi querido lector, el último libro que leí de Isabel Allende me decepcionó un poco debido a que sentí que le faltó la magia que tanto caracteriza a sus obras (puede leer la reseña aquí). Según mi teoría, esa falta de “inspiración” pudo deberse a que escribió “Más allá del invierno” después de divorciarse de William C. Gordon, su segundo esposo con el que estuvo casada por 27 años. Curiosamente el siguiente libro que leo de Isabel es “El plan Infinito”, el cual narra la historia de su ahora ex marido. Claro que este libro lo escribió hace casi 30 años, razón por la que considero conserva esa magia que tanto admiro.

Gregory Reeves nació en una familia bastante peculiar. Su papá Charles Reeves, era un predicador de origen australiano que transmitía su doctrina de pueblo en pueblo en la costa Oeste de los Estados Unidos. Su mamá, Nora, era de origen ruso y era una mujer abnegada completamente dependiente de su marido. Tenía una hermana mayor: Judy. Junto con ellos viajaba Olga, quien había conocido a Nora en su viaje de Rusia a América. Los cinco viajaban en una caravana llamada “El plan infinito”. Al lugar al que llegaban rentaban o buscaban un lugar donde la gente pudiera escuchar la palabra de Charles, claro, todo por un módico precio. Además, al final les enjaretaban el libro que había escrito el “Doctor en Ciencias Divinas” como se autonombraba Charles, por otros pocos dolaritos. Olga por su parte, cumplía dentro de ese “show” la función de “curandera”, por lo que leía las cartas y predecía el sexo de los bebés en el vientre de sus mamás.

Sin embargo, el lado divino de Charles lo abandonó cuando se enfermó. Esto provocó que tuvieran que asentarse en Los Ángeles, en concreto en el barrio latino. Gracias a la ayuda de la familia Morales, cuyo jefe era feligrés de la “religión” de Charles, pudieron quedarse unos días en su casa, hasta que debido a los estragos de la enfermedad del predicador tuvieron que vender la caravana y comprar una cabaña donde pudieran instalarse de forma permanente hasta que mejorara, si es que lo hacía, la salud de Charles.

Desafortunadamente Charles falleció, dejando de esta forma desamparada a su familia.  A Nora en concreto se le zafaron varios tornillos. Gregory tuvo que acoplarse a una vida sedentaria, y aguantar el bullying que recibía en la escuela al ser de los pocos “güeritos” en el barrio latino. Judy por el contrario al darse cuenta que llamaba demasiado la atención, empezó a excederse con la comida porque se sentía incómoda con su cuerpo. Olga abrió su consultorio donde leía las cartas y vendía amuletos y menjurjes para toda ocasión.

De esta forma, Gregory se ve obligado desde muy pequeño a trabajar, y debe aprender a defenderse, a buscar su lugar en el mundo sin la figura paterna y con una madre semiausente, llevándolo a tropezar y a levantarse n+1 veces. Así, su historia se desenvuelve entre Los Ángeles, San Francisco y con una visita significativa a Vietnam…

El libro como mencionaba anteriormente, me gustó mucho. La fusión de culturas y de tradiciones que se dan en un país como Estados Unidos es fascinante, y la forma en la que Isabel Allende las describe, insisto, es MÁGICO.

Por cierto, este año William C. Gordon falleció…

Mi calificación subjetiva:



miércoles, 11 de diciembre de 2019

“One day in December” by Josie Silver



Snif, snif, disculpe usted mi estimado lector pero sigo llorando al terminar de leer este libro, y si a eso le añadimos que acabo de ver la serie “Modern Love”… no bueeeno, ando sensible.

Y es que este libro te hace reflexionar sobre la famosa frase “meant to be”, o “la fuerza del destino” como bien lo describe Mecano en su canción. ¿Qué tanto de nuestras decisiones nos acercan o alejan del amor de nuestra vida? o ¿Realmente no importa lo que hagamos, al final como dirían en mi pueblo “Si algo es para ti, aunque te quites, y si no, aunque te pongas”?

Imagínese la escena: Londres en Diciembre (frío pero hermoso). Laurie, una chica veinteañera sale de su trabajo y se dirige a su casa como todos los días en autobús. Hora pico, salida godín, autobús lleno, oliendo a “humanidad” ¡ewww! Laurie no ve la hora en la que por fin pueda llegar a su destino. En eso, en una parada de autobús ve a un chico bastante guapo, así justo como se lo recetó el doctor. Ella espera que se suba al camión, pero aparentemente no es su ruta. En esos pocos segundos que pasan, piensa si sería una buena idea bajarse y aplicar la técnica de Carly Rae Jepsen y decirle “Here’s my number, so call me maybe”, pero antes que pueda tomar una decisión, el autobús arranca y sólo se le ocurre mandarle un beso a su “crush”…

Laurie vive con su amiga Sarah,  a la que le cuenta el momento cómico/mágico/musical que acaba de tener y como si fuera cuestión de vida o muerte deciden buscar al chico misterioso del autobús así sea lo último que hagan. Los siguientes meses acuden a bares, restaurantes, etc. a ver si de puuura casualidad lo encuentran (Ja, me suena conocido).

Casi un año ha transcurrido desde ese encuentro mágico y siguen sin localizar al chico del autobús, por lo que Sarah viendo un tanto cuanto imposible que se cumpla su misión, decide mejor servir de cupido entre Laurie y un compañero de su trabajo, es más, aprovechará una fiesta que están organizando para hacerlo y además le presentará a su nuevo galán con el que lleva unas semanas saliendo.

Y bueno, como sabemos que la vida tiene un sentido del humor bastante negro, resulta que el nuevo novio de Sarah es… ¡¡¡el chico del autobús!!!! (que por cierto se llama Jack).

A Laurie casi se le va el alma al cielo cuando se da cuenta de la terrible coincidencia, ¿Por qué habiendo tantos hombres en este mundo, tenía que ser el chico del autobús el nuevo novio de Sarah? Laurie no dice nada al ver que por parte de Jack tampoco hay una reacción al conocerla. Obviamente sólo ella se inventó una potencial historia de amor en su cabeza, sin tener en cuenta que faltaba que la otra parte estuviera de acuerdo, además, no podía hacerle una mala jugada a su mejor amiga, así que decide callar.

Y así, Laurie finge. Finge que no sufre al ver cómo se desarrolla la relación entre Jack y Sarah. Finge que no conoció a Jack antes de esa noche. Finge ser feliz…

¿Tendrá esta historia un final feliz? ¿Por qué a la Ley de Murphy le gusta manifestarse a veces de maneras tan extrañas?

Si lo cursi es lo suyo, este libro definitivamente DEBE LEERLO ¡Ya!

Mi calificación subjetiva: