Fondo

miércoles, 5 de junio de 2019

“A secret history of witches” by Louisa Morgan



Este libro lo compré porque me llamó la atención la portada y el título, ya que pensé: igual y contiene unos cuantos hechizos para practicar y así poder convertirme en una bruja poderosa ¡ñaca, ñaca! (porque brujas ya estamos muchos al final de la quincena y es el look que manejamos cuando nos despertamos jaja), además, como terminé de ver recientemente en Netflix las dos temporadas de “El mundo oculto de Sabrina” estoy entusiasmada con esa onda “brujeril”.

El libro comienza en 1821, cuando la familia Orchiére encabezada por la abuela Úrsule, huye de su lugar de origen en Francia, debido a que les llegó a noticia que los “cazabrujas” andaban desatados y que se encontraban en una ciudad cercana a la suya . La abuela Úrsule, tras consultar sus cristales mágicos, les comenta a sus nietas que existe una casa abandonada en la zona de Cornualles Inglaterra, cerca de St. Michael’s Mount, donde deben llegar para estar a salvo. La familia emprende su camino, sin embargo, la abuela no logra sobrevivir al viaje…

13 años pasan de ese peregrinaje, y las hermanas Orchiére junto con sus esposos, arreglan la casa y la convierten en una granja, donde cada uno realiza alguna actividad que les sirve para subsistir. Al ser brujas, (sólo ellas porque los hombres son mortales como usted y como yo), tratan de convivir lo menos posible con los habitantes de la zona, y sólo van al pueblo una vez por semana a vender la mercancía y demás artículos que producen en su granja. Este aislamiento, y el hecho que no asisten a la misa dominical, hace que la gente esparza rumores sobre esa extraña familia.

Nanette es la hermana más pequeña de la familia Orchiére. Cuenta con apenas 17 años, y piensa que su vida es monótona y aburrida. Sus demás hermanas, acudían a un pequeño altar que mantenían escondido dentro de una cueva cercana a su granja, y realizaban rituales tratando que el cristal de la abuela Úrsule les respondiera, sin embargo, al parecer ninguna de ellas contaba con la suficiente magia para lograrlo. Al ya ser mayor, decidieron invitar a Nanette a una de sus reuniones, y para su sorpresa, el cristal reaccionó ante ella, significando así que la pequeña hermana era la elegida para heredar la magia del linaje Orchiére (cabe señalar que a diferencia de lo que sucede en la mayoría de las culturas, en el caso de las brujas el poder sólo se hereda a mujeres, por lo que si una bruja tiene un hijo varón, hasta ahí llego su linaje).

Una de las hermanas de Nanette tiene constantemente sueños premonitorios, por lo que le advierte a la pequeña bruja, que soñó con que conocía a un hombre que cambiaría su vida. Nanette no le cree mucho debido a que no conoce a muchas personas debido a su aislamiento, y los pocos jóvenes con los que llega a convivir no le hablan al considerarla “rara”.

Un día pasa por la granja un hombre guapetón que se dedicaba a arreglar las herraduras de los caballos. Nanette al verlo se siente flechada por cupido, y aprovechando sus poderes mágicos, realiza un hechizo para enamorarlo. Sin embargo, sólo consigue una noche de pasión, ya que al día siguiente el “caballero” continúa su camino. Peeero, ese encuentro no fue en vano, ya que Nanette queda embarazada…

Cada capítulo del libro está dedicado a una de las descendientes de la familia Orchiére, el cual contiene desde su reacción al enterarse que forma parte de una familia de brujas, hasta el uso que hace de sus poderes, los cuales aprenderemos en cada una de las historias, tienen un costo, ya que aunque la magia te puede dar lo que pides, eventualmente te quitará algo para equilibrar las fuerzas del universo…

El libro está entretenido, y lo que me asombró es que nuevamente se menciona a la monarquía inglesa como parte de ese mundo mágico brujeril (la primera referencia sobre ese tema lo leí en “La hora de las brujas”), lo cual explicaría cómo la Chabela con más de 90 años sigue manteniendo un gran poder.

Mi calificación subjetiva:



No hay comentarios:

Publicar un comentario